Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

El Museo Picasso de Barcelona, es el centro de referencia para el conocimiento de los años de formación del artista malagueño, Pablo Picasso (1881 – 1973), y eso se revela a través de su colección permanente, compuesta por un total de 4.251 obras que van desde pinturas, esculturas, dibujos y grabados.

Situado en la calle Montcada de la Ciudad Condal, abrió sus puertas al público el 9 de marzo de 1963, y desde el año 2005, declarado por la Generalitat de Cataluña, museo de interés nacional.

Su actual director, es Emmanuel Guigon.

Historia e inicios de la colección

El museo Picasso nació gracias a la idea de Jaime Sabartés, amigo personal y secretario del artista, tras en 1960, proponer al Ayuntamiento de Barcelona, la posibilidad de crear un museo dedicado exclusivamente al artista malagueño.

Este firma dicho acuerdo, y tres años después, el 9 de marzo de 1963, se inauguraba oficialmente el museo, bajo el nombre de Colección Sabartés, con la donación de las primeras obras del propio Jaime, el Ayuntamiento de Barcelona, que ya era propietario de algunas obras del artista, como Arlequín, donado por el mismo Picasso, las 22 obras provenientes de la Colección Plandiura, adquiridas por la Generalitat, un collage donado por Gala, Cabeza (1913), así como algunas obras más cedidas por el MNAC.

A partir de ese momento, la colección se fue completando gracias a las numerosas donaciones, tanto de particulares, como de diversas galerías de arte, y el museo creció en importancia.

En 1968, al morir Sabartés, Picasso entrega a la pinacoteca una serie de 58 cuadros sobre Las meninas de Velázquez, así como el retrato que había realizado para su amigo Jaume, en 1901.

Dos años después, en 1970, y antes de que este falleciera, el malagueño realiza su segunda donación, la más grande de todas, que consistía en un total de 921 obras de estilos, épocas y técnicas diferentes. Se trataba de toda la colección que su familia tenía guardada en la ciudad, básicamente conformada por obras tempranas.

En 1982, su viuda hizo entrega de más de 40 piezas de cerámica, y el fotógrafo Roberto Otero dio una recopilación gráfica con 80 fotografías del pintor y de su círculo. Al año siguiente, sus herederos, junto con la Galería Louise Leiris, realizaron una donación de 117 grabados. Algunas otras donaciones destacables son los donativos de Domingo Carlos y la Editorial Gustavo Gili.

60. Museo Picasso Barcelona - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

Edificios del Museo Picasso de Barcelona

El Museo Picasso ocupa actualmente cinco grandes palacios, fechados entre los siglos XIII y XIV, de la calle Montcada de Barcelona, extendiéndose por un área de más de 10.000m².

Los edificios son una buena muestra del estilo del gótico civil catalán, aunque han sufrido importantes remodelaciones a lo largo del tiempo, las más destacadas del siglo XVIII.

Todos ellos, están construidos siguiendo un patrón similar, alrededor de un patio interno, provisto de una escalinata exterior descubierta que permite el acceso a las plantas nobles. Estos cinco palacios son:

83. Planta Museo Picasso de Barcelona - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

Palacio Aguilar

Fue el primer palacio ocupado por el museo. El edificio, construido probablemente sobre la residencia de Jaime Ses Fonts, un importante personaje de la vida barcelonesa, data del siglo XIII. Entre los siglos XIII y XIV, perteneció a varios nobles de la Corte de Aragón, hasta que, en 1386, fue comprado por la familia burguesa Coromines-Desplà, quienes acabaron vendiéndolo 14 años más tarde, a Berenguer de Aguilar, de quien tomó el nombre.

Tras pasar posteriormente por otros miembros de la burguesía catalana, en 1953 el Ayuntamiento de Barcelona compra el edificio, y durante una de sus restauraciones, realizadas en los años 60, tras sacar el revoque de una de sus salas, se encontraron con los restos de unas pinturas murales de siglo XIII, que tenían que ver con la conquista de Mallorca de 1229, y que a día de hoy se conservan en el Museo Nacional de Arte de Cataluña.

66. Museo Picasso Barcelona Aguilar - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

Palacio del Baró de Castellet

Se trata de un palacio de época medieval, y que al igual que el anterior, fue remodelado por los antiguas propietarios durante el siglo XVIII. Si bien, fue construido también en el siglo XIII, y hasta que de nuevo fue adquirido por Ayuntamiento de Barcelona en los años 50, pasó por varias por manos entre familias burguesas y aristócratas de la ciudad condal.

Su nombre se le debe, a una de ellas, cuando en 1797, el entonces propietario, Mariano Alegre de Aparici i de Amat, recibió el título nobiliario de Barón de Castellet, de manos del rey Carlos IV.

De este, destaca un relieve con temática religiosa que se puede observar en su fachada, realizado durante el siglo XVI, y el salón neoclásico, de mediados del siglo XVIII, de la planta principal, donde se encuentran elementos de mármol y relieves policromados.

PUEDE INTERESARTE TAMBIÉN
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS)

62. Museo Picasso Barcelona Caste - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

Palacio Meca

Es un palacio edificado entre el siglo XIII y el XIV. También sufrió una reforma como el resto de palacios anteriores durante el siglo XVIII. De este, se conserva la documentación donde se otorga, en 1349, la propiedad del palacio, a Jaime Caballero, entonces consejero del Ayuntamiento de Barcelona. Su nieto, Ramón Desplà, convertiría el palacio en el más importante de todo alrededor.

Posteriormente, pasó a ser propiedad de la saga de los Cassador, siendo su primer propietario, José Meca y Cazador, de ahí su actual nombre. La siguiente familia propietaria, sería la Milans, quien reformó el edificio después de ser afectado durante el bombardeo de 1714.

Después de ser donando en 1901 a los hermanos de la Doctrina Cristiana, e instalarse el Monte Pio de Santa Madrona, y con el tiempo, integrarse dentro de una entidad bancaria, en 1977, esta se lo cedía al Ayuntamiento de Barcelona.

De este, cabe destacar, los artesonados medievales policromados de la planta principal y algunos techos decorados durante el siglo XIX.

63. Museo Picasso Barcelona Meca - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Casa Mauri

Aunque su construcción data del siglo XVIII, se sabe que la casa se asienta, parcialmente, sobre estructuras de la época romana, correspondientes a una de las villas de los suburbios de la colonia Barcino.

Se piensa, y es posible, que en el siglo XIII la casa formara parte de las dependencias del edificio vecino, el palacio Meca. Entre 1378 y 1516, perteneció a la familia Rocha, sin embargo, y a partir de esa última fecha, un vacío documental, nos vuelve a situar ya en 1716, cuando era propiedad de F. Casamada.

Durante el siglo XIX, se hicieron varias reformas, cuando su propietario era Josep Vidal i Torrents. A partir de entonces, una parte importante del edificio se dedicó a usos industriales, hasta que, en 1943, fue comprado por las confiterías Mauri, empresa que le dio el nombre. En 1999, fue adquirida por el Museo Picasso.

De esta sobresale, la celosía de madera de la fachada, ya que se trata del único ejemplar en Barcelona, con este sistema de cierre típico del siglo XVIII.

64. Museo Picasso Barcelona Mauri - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

Palacio Finestres

Esta construido sobre las bases de un edificio del siglo XIII, ocupando el espacio de una antigua necrópolis romana. Entre 1363 y 1516, el palacio perteneció al linaje de los Marimon, y al igual que el anterior, se desconocen durante un tiempo sus propietarios, hasta que, en 1698, fue adquirido por la familia Dalmases.

En 1872, el propietario de la Casa Mauri, José Vidal y Torres, compró el edificio para anexarlo a su casa, hasta que fue adquirido por el ayuntamiento en 1970.

Destacar, de la planta baja, un conjunto de salas con arcadas de gran belleza arquitectónica, que fueron añadidas durante una reforma del siglo XV y ampliadas en los siglos XVII-XVIII, y de la planta noble, el techo artesonado de finales del siglo XIII, así como dos ventanales trigeminados, con columnas.

Actualmente es el espacio que acoge las exposiciones temporales del Museu Picasso.

65. Museo Picasso de Barcelona Finestres - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

La colección permanente

La mayoría de las pinturas que se exponen en el Museo Picasso de Barcelona, corresponden al periodo comprendido entre los años 1890 – 1917, de ahí, que se trate de una de las colecciones más completas del mundo en obras de su juventud.

A través de ellas, pueden verse reflejados determinadas etapas de la vida del artista, desde su época infantil y escolar (1890 – 1897), vividas entre Málaga, La Coruña y Barcelona, cuando realizó sus primeras obras de arte como, La Primera Comunión o Ciencia y Caridad, cuando tan solo contaba con 15 años.  La etapa de formación entre Barcelona, la Horta de Sant Joan y Madrid (1897 – 1901).

También hay obras de su característico periodo azul (1900 – 1904), que desarrolla alternando las vivencias entre Barcelona y París, alguna que otra de su etapa rosa (1905 – 1906), así como obras de su periodo barcelonés, en torno, al año 1917, como su famoso Arlequín, y que donó al Ayuntamiento.

Posteriores a esta última fecha, es decir, 1917, si es verdad, que el museo no dispone de tantas pinturas, exceptuando algunos casos en concretos, como la serie de los 58 cuadros que realizó, reinterpretando con esos aires cubistas, tan propios de él, Las meninas de Diego Velázquez, pintadas en 1957.

Respecto a la colección de grabados y litografías, vienen a comprender básicamente el periodo entre 1962 – 1982, entre los que se incluyen algunas de las ilustraciones que realizó para diversas ediciones de libros, como Las Metamorfosis de Ovidio. Finalmente, la muestra, viene a completarse con algunas piezas escultóricas, y las 41 piezas de cerámica que Jacqueline Roque, su viuda, acabó donando en 1982.

PUEDE INTERESARTE TAMBIÉN
Picasso/Lautrec en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza

Desde 2010, el museo, a través de su página web ofrece la oportunidad de poder realizar visitas on-line a su colección, y consultar más del 65% de sus fondos.

67. Museo Picasso Barcelona Permanente - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

Sala 1. Los inicios – Málaga (1890) – La Coruña (1891 a 1985)

Picasso entró a muy temprana edad en contacto con el arte, y es que su padre, José Ruiz Blasco, era profesor de dibujo, primero lo fue en Málaga, luego en La Coruña y posteriormente en Barcelona. A todas las ciudades, iban acompañado de su familia, pero la vinculación entre padre e hijo, fue muy estrecha, gracias al gusto común por el dibujo que ambos tenían.

En esta sala, podrán ver algunos de los primeros dibujos que realizó, cuando tan solo tenía 9 – 10 años, marcados por un trazo y una composición de carácter infantil, aunque con un cierto tono académico, intentando emular a su padre.

De la época de La Coruña, se muestran varios dibujos que comenzó a realizar como ejercicios y algunas pequeñas tablas al óleo.

Obras destacadas:

  • Hombre con boina (1895).
  • Retrato de la madre del artista (1896).
  • Retrato del padre del artista (1896).
  • Autorretrato (1896).
  • Autorretrato con peluca (1897).

68. Corrida de Toros y palomas 1890 MPB - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Salas 1, 2 y 3. Formación Barcelona (1895 – 1897)

Ya en Barcelona, el padre de Picasso, decide inscribirlo en La Escuela de Artes y Oficios de la ciudad, de modo que en estas salas podrán ver una serie, tanto de dibujos como óleos, y ahora sí, académicos, entre los que destacan los dibujos al natural, y algunos otros que realizó de lugares concretos de Barcelona, donde ejercitó la pintura al aire libre.

En ellas también se exhibe el primer óleo que presentó en la III Exposición de Bellas Artes e Industrias Artísticas de Barcelona, La primera comunión, cuando tan solo tenía 15 años de edad. Igualmente, el Retrato de la tía Pepa, probablemente el retrato más importante que se tenga de su etapa formativa.

 Y de nuevo, su padre, viendo la enorme capacidad dibujística que había desarrollado en tan pocos años, decide mandarlo a Madrid, para que estudiase Bellas Artes, y allí creó una de grandes obras maestras de juventud, Ciencia y Caridad, una pintura influenciada por ese realismo academicista, que tanto llamó la atención entre los medios artísticos de la época, hasta acabar obteniendo una mención honorífica en la Exposición Universal de Bellas Artes de Madrid.

Obras destacadas:

  • Paisaje montañoso (1896).
  • Retrato de la tía Pepa (1896).
  • Ciencia y caridad (1897).

70. Retrato de la tia Pepa - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala 3. Madrid – Horta de Sant Joan (1897 – 1899)

En este espacio, podrán ver algunas otras obras que realizó durante el tiempo que residió en Madrid, como ya hemos dicho, estudiando en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

Cuando terminó, regresó de nuevo a Barcelona, enfermó de la escarlatina y se fue a Horta de Sant Joan, el pueblo de su amigo Pallarès. Allí realizó varias pinturas típicas del ambiente rural, quedando patente su tratamiento de la luz, así como la espontaneidad de sus pinceladas.

Obra destacada:

  • El mas del Quiquet (1898).

71. Horta Mas Quiquet Picasso - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala 4. Barcelona (1899 – 1900)

En esta sala, se muestran las pinturas de cuando el artista malagueño, entró en contacto con el vanguardismo catalán y el círculo de Els Quatre Gats, un bar que se acabó convirtiéndose en el lugar de reunión preferido por los artistas y literatos de la época, y donde Picasso se atrevió a dar su primera exposición individual.

Obras destacadas:

  • Retrato del escritor Ramon Reventós (1900).
  • Poeta decadente (1900).
  • La calle de la Riera de San Juan, desde la ventana del estudio del artista (1900).

72. Ramon y poeta decadente - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala 5, 6 y 7. París (1900 – 1901)

Esta parte de la exposición, viene a recoger aquellas primeras experiencias que Picasso vivió en París, es decir, cuando llega aquel otoño del año 1900, y entra en contacto con las vanguardias europeas, y él, especialmente centrándose en tendencias artísticas como el impresionismo, el puntillismo y los nabis.

Las obras que aquí se exponen muestran su observación del París nocturno, de la vida de Montmartre, y de sus personajes ambientes.  En cuanto a nivel estético, son obras donde hace uso de esa pincelada, más bien suelta, ligera y áspera, y de colores cálidos.

Obras destacadas:

  • El diván (1900).
  • El abrazo (1900).
  • Barraca de feria (1900).
  • El final del número (1901).
  • Bodegón (1901).
  • La espera (Margot) (1901)

73. El abrazo de Picasso - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala 8. Época Azul (1901 – 1904)

Entre Barcelona y París (1900 -1904), es cuando se desarrolla su famosa “etapa azul”, muy influenciada por el simbolismo, y conocida así por ser el color azul el predominante en las pinturas, llegando progresivamente hasta obras casi monocromáticas al final de la etapa.

Obras destacadas:

  • La mujer de la cofia (1901).
  • Azoteas de Barcelona (1903).
  • Desamparados (1903).
  • El loco (1904).
  • Cabeza de mujer (Fernande). Escultura. (1906).

74. Azoteas de Barcelona - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala 9. Época Rosa (1905 -1906)

Durante los años 1905 – 1906, tiene lugar otra de las etapas más conocidas, aunque más breve que la anterior, la llamada “etapa rosa”, donde la mayoría de sus obras vienen a reflejar un mundo nuevo, el mundo del circo, por el cual sintió una gran admiración, es decir, por los arlequines, los saltimbanquis, los acróbatas…y que pintaba con esas tonalidades rosáceas, que a veces alternaba con el gris o el azul.

PUEDE INTERESARTE TAMBIÉN
Cuadros que se hicieron pedazos

Obras destacadas:

  • Retrato de la señora Canals (1905).
  • Arlequín

86. Canals - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Salas 10 y 11. Barcelona (1917)

Antes de que Picasso volviera a Barcelona, entra en contacto con el mundo del ballet, siendo esta la época en la que conoce a la bailarina Olga Khokhlova, con quien más tarde se casaría. Se trata de este, y al igual que el anterior, de un periodo muy corto, pero donde podrán ver algunas obras en la que el artista intentan buscar nuevas fuentes y nuevos recursos plásticos, de ahí que, muchas de ellas estén inspiradas en el clasicismo.

Obras destacadas:

  • La ofrenda
  • Caballo corneado
  • El Paseo de Colón
  • Blanquita Suárez
  • Copa y paquete de tabaco

84. La ofrenda - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Salas 12 y 13. Las meninas

En estas dos salas, se expone la serie de Las meninas, realizadas por el artista malagueño entre agosto y diciembre de 1957, cinco meses en los que lleva a cabo un gran estudio exhaustivo, recreando y reinterpretando uno de los cuadros más famosos que nos ha dado la Historia del Arte, Las meninas de Diego Velázquez.

Se trata de un total de 58 obras, de las que 48 fueron dada por el propio artista al museo en el año 1968. De ese total, solo 45 son reinterpretaciones de la obra de Velázquez, el resto corresponde a escenas de pichones, tres pinturas paisajísticas y un retrato de Jacqueline.

Obras destacadas:

  • Serie Las meninas. El conjunto (1957).

77. Las meninas Picasso - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Salas 14 y 15. Los Pichones y Picasso ceramista

Además de la pintura, a Picasso no se le resistieron otros géneros como la escultura, los dibujos, los grabados, el vestuario, el diseño de escenografías para el montaje de obras teatrales, la ilustración de libros, o la cerámica.

Esta última habilidad, la desarrolló en torno al 1946, año en el que se fue a pasar el verano a Vallauris, y donde acabó conociendo a un matrimonio, propietario de una fábrica de cerámica, lo que contribuyó a que empezará a trabajar con este otro material, y que nunca antes había tocado.

Le gustó tanto, que, durante los años siguientes, intensificó esa labor como ceramista, buscando de nuevo, resultados experimentales durante los procesos de manipulación y cocción.

En estas salas, podrán ver algunas de esas piezas, gracias a la donación que realizó, su viuda, Jacqueline Picasso al museo en 1982.

Obras destacadas:

  • Cerámica: Escena de corrida con pescado (1957).
  • Los pichones (1957).
  • Pintor trabajando (1965).
  • Hombre sentado (1969).

78. Cerámica Picasso - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala S. Espacio Sabartés.

El museo no ha querido dejar en el olvido a quien fue su primer promotor, Jaime Sabartés, secretario y amigo personal del pintor desde el año 1935, y para ello, ha creado un nuevo espacio dedicado a él.

Una de las obras más sobresalientes de esta sala, es el retrato que Picasso le hizo con gorguera, pintado en Royan en 1939.

Obra destacada:

  • Retrato de Jaume Sabartés con gorguera y sombrero

80. Retrato de Jaume Sabartés con gorguera y sombrero - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 Sala G. Grabados

Picasso, como bien todos sabemos, fue uno de los grandes maestros del grabado moderno. A lo largo de su vida, realizó una ambiciosa producción conformada por más de 2.000 obras, muchas de las cuales se encuentran hoy día en el museo, aunque por razones preventivas, no todos los grabados relevantes de dicho autor se encuentran expuestos.

En total, el museo cuenta entre esa gran colección de obras grabadas, así como en litografías, con más de 1.500 estampas, algunas provenientes de la donación de Jaime Sabartés.

Otras muchas, las dio el propio Picasso, tras rendirle un pequeño homenaje a la muerte su amigo Jaime, comprometiéndose a dar a la pinacoteca, desde entonces y hasta el final de sus días, un ejemplar de cada obra que produjera. El resto, son donaciones que han realizado otros benefactores, y obras que ha ido adquiriendo poco a poco el museo.

Obras destacadas:

  • Las metamorfosis de Ovidio (1930 – 1931)
  • La Minotauromaquia (1935).
  • Suite Vollard (1930 – 1937).
  • Sueño y mentira de Franco (1937).
  • Ilustraciones de la Celestina (1968).

81. La minotauramaquia - Museo Picasso de Barcelona. Espacios para el arte.

 

- A los 11 años visité el Prado por primera vez y jamás volví a ser el mismo.
- Amante de la Historia, la Cultura y las Bellas Artes.
- Desarrollador web y SEO desde 2003.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

*